La Organización de mujeres rurales, FADEMUR, celebra el Día del Emprendimiento femenino con una demanda, “el apoyo a las emprendedoras debe saltar de los discursos contra la despoblación y materializarse en hechos”.
Aella Pazos
“Todas las voces expertas señalan la necesidad de afianzar a las mujeres en el medio rural si queremos llenar la España Vaciada”, recuerdan desde FADEMUR, “pero esto no significa que tengamos que ser promovidas en los pueblos como madres, sino como empresarias”. Han sido así de contundentes desde la Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales porque, para ellas, no basta con que se sensibilice sobre la importancia de que las mujeres permanezcan en los pueblos, sino que se necesita que tengan oportunidades reales de formarse profesionalmente en ellos.
A este respecto, es mucho más difícil para las mujeres vivir en los pueblos; sufren mayor techo de cristal y suelen ser marginadas por el escueto mercado laboral. Además, hay mayor segregación horizontal en el mercado laboral rural que en el urbano. Por ello, muchas mujeres se ven obligadas a elegir entre rendirse, o crear un negocio propio. Pero, para poder escoger la segunda opción en “condiciones dignas”, la organización ha señalado que el mundo rural debe subsanar de inmediato varios puntos vitales.
Estos puntos tienen que ver principalmente con el aislamiento de su entorno. “¿Cómo puedes competir hoy en día si no tienes un acceso de calidad a internet o, directamente, no tienes acceso?”, se preguntan desde FADEMUR, señalando también otras cuestiones como la cobertura telefónica o la disponibilidad de vías de transporte adecuadas. “Sencillamente, al ignorar estas demandas condenan al fracaso a muchos proyectos de emprendimiento rural”.
Por otra parte, la Asociación ha señalado la falta de oferta formativa y de acceso a asesoramiento adecuado en los pueblos como otro punto de desigualdad para el emprendimiento. “Por supuesto, esta brecha se reduciría si pudiésemos contar con el mismo acceso que tienen en las ciudades a las tecnologías de la información y la comunicación”, explican desde la organización, “es la pescadilla que se muerde la cola”.
Por estos motivos, la federación decidió impulsar la Lanzadera de Emprendimiento Rural, Ruraltivity. La iniciativa consiste, principalmente, en formar y asesorar a las emprendedoras rurales a la vez que las ayuda en la comercialización de sus productos y servicios. A lo largo de 3 años, Ruraltivity ha impulsado ciertos proyectos, dando una oportunidad tanto a sus responsables como a los pueblos en los que éstos están ubicados.
Por último, FADEMUR señala los problemas para acceder a fuentes de financiación. “A través de Ruraltivity reclutamos apoyos entre el sector privado” dicen, en referencia a iniciativas como el programa TalentA o las condiciones ventajosas que las emprendedoras tienen en Correos Market. “Sin embargo, esto no es suficiente. Las entidades bancarias otorgan financiación de manera desigual entre sexos con el machismo como única razón: las mujeres tienen más dificultades para acceder a la financiación a pesar de tener menores índices de morosidad” han explicado, “esto es intolerable. Tenemos que actuar”.
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