En un 34,5% de los casos son ellas las que deciden instalar espacios para separar los residuos, según Ecoembes
La madre es la figura familiar que con mayor frecuencia se responsabiliza del reciclaje en los hogares españoles porque en un 34,5% de los casos son ellas las que deciden instalar espacios destinados a la separación de los residuos, mientras que el padre es el que toma la decisión en un 14,7% de las ocasiones y ambos adoptan esa iniciativa en un 29,3% de las veces.
Ésta es una de las conclusiones principales del ‘Estudio de Hábitos de Reciclaje’, elaborado por el Instituto Adolda para Ecoembes, organización medioambiental dedicada al reciclaje de envases de plástico, latas y briks (que se depositan en el contenedor amarillo), y de papel y cartón (en el contenedor azul).
El estudio, que cuenta con una muestra de más de 5.000 personas repartidas en toda España y fue hecho público este jueves, indica que la separación de residuos es un hábito muy extendido en todas las franjas de edad de las familias españolas, aunque los más comprometidos son los adultos de entre 35 y 54 años.
El 76,9% afirma disponer de más de un espacio para reciclar en casa, uno de ellos para los envases que se depositan en el contenedor amarillo. Esta afirmación es compartida por el 72,5% de los españoles mayores de 55 años y por el 66,7% de los jóvenes de 16 a 34 años.
El estudio señala que la sociedad española está concienciada con la separación de residuos porque los hogares tienen una media de tres cubos en casa, aunque hay diferencias en función del número de integrantes, ya que las familias con cuatro miembros son los que más cubos destinan a separar los residuos (3,1).
Por comunidades autónomas, País Vasco (3,7), Navarra (3,4) y Cataluña (3,4) son las regiones que tienen la media más elevada de espacios destinados a la separación de residuos en el hogar.
El informe también evalúa los factores que motivan a los ciudadanos a disponer de varios espacios en sus casas para separar correctamente los residuos. Las razones mayoritarias son el civismo (95,9%), el sentimiento de orgullo por reciclar bien (67,4%) y la mayor concienciación general de la sociedad (55,7%), mientras que el freno principal de los ciudadanos que declaran no reciclar es la falta de espacio en el hogar (16,9%).
13,2 KILOS POR PERSONA Y AÑO
Por otro lado, los españoles cada vez identifican mejor a qué contenedor va cada tipo de residuo, puesto que el 68,6% asegura asociar y tirar siempre en el contenedor amarillo botellas, botes o garrafas de plástico, al igual que el 60,2% en el caso de los briks.
Las latas de bebidas (53%) y de conservas (47,3%) también se relacionan y depositan en ese contenedor, mientras que los aerosoles (26,2%) y las tapas metálicas de los frascos (24,4%) son los que menos se asocian con el contenedor amarillo y, por tanto, los que menos se reciclan.
El estudio indica que cada español depositó el año pasado 13,2 kilos de envases de plástico, latas y briks en el contenedor amarillo, y 15,5 kilos de envases de papel y cartón en el azul. En total, en 2016 se reciclaron 1,3 toneladas, un 4% más que en 2015.
